El objetivo de esta entrada es muy preciso: establecer la diferencia entre el coaching para empresa y el coaching de empresa.
Porque entiendo que no es lo mismo.
Soy de la teoría de que los servicios que hasta ahora hemos ofrecido a la empresa pueden ser PARA ELLA pero no son DE ELLA.
Trataré de explicarme.
Ejercemos nuestra actividad, en el ámbito de la empresa, con las personas directivas y equipos de trabajo que la componen. Ayudamos a forjar líderes, ayudamos a hacer crecer al individuo, ayudamos a construir sólidos equipos de trabajo, y un largo etcetera de aplicaciones del método que alcanzan distintos niveles de acción y objetivos personales.
Pero estas actividades profesionales que ejercemos en el ámbito empresarial se centran en el individuo, en las personas que conforman la empresa, no en la entidad, en la empresa como persona jurídica.
El conjunto de estas actividades lo denominamos coaching para empresa y de esta forma estamos definiendo su ámbito de actuación. Pero su objeto de actuación hemos visto que no es la empresa sino las personas.
El coaching de empresa sí que define el ámbito y también el objeto de aplicación del método: la empresa.
Una mirada a la red me reafirma en mi teoría: la oferta de coaching vinculado a la empresa que encuentro en ella es en realidad un entrenamiento para las personas que integran las estructuras de la empresa: sus directivos, sus ejecutivos, sus equipos departamentales.
Para ilustrar lo que digo me ayudo de Google y busco «coaching de empresa». Me aparece una larga lista de resultados. Pero ninguno tiene que ver con el coaching de empresa: veo coaching en empresa, coaching para empresa, todos ellos vinculados al personal de la empresa, y en ningún caso coaching de empresa vinculado a la organización.
Establecida la diferencia entre ambas denominaciones, la cuestión siguiente es ¿qué pasa si no quiero que me entrenen a mi o a los míos? ¿Y si quiero entrenar la empresa como conjunto de las áreas funcionales que la integran?
Lo que planteo es si se puede aplicar el método al conjunto de la empresa, más allá de las personas que la componen.
Y mi respuesta es que sí.
Considero que se puede desarrollar el método del coaching de forma trasfuncional en la empresa llevando su aplicación a los procesos críticos de negocio en los que se sustenta el éxito de cualquier organización.
Dejo la reflexión en este punto y espero los comentarios y críticas constructivas a esta visión del coaching de empresa que hoy comparto con todos.
Aquí solo coaching de empresa experto
¿Coaching para empresa o coaching de empresa?
¿Dónde se establece la diferencia?
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